Cuando Seth Riney comenzó en 2003 un servicio de taxi de autos híbridos en Boston, el ingeniero aeroespacial  de 33 años no busco inversionistas privados. En cambio, encontró a un financiero más compatible: el mismo.

Riney cambio su camioneta pick up 2002 Dodge Dakota por un Toyota Prius. Mantuvo un empleo fijo y trabajo temprano en las mañanas y por las noches llevando a amigos y familiares dispuestos a pagarle el viaje. Luego de unos meses, ahorro dinero suficiente para contratar a su primer empleado y dar el pago inicial para otro Prius. A medida que su efectivo crecía, añadió más híbridos y más choferes.

Hoy, el negocio de Riney, Planet Tran, ha crecido y tiene flota de 35 híbridos y unos 75 empleados. Recientemente, expandió su servicio de taxi a San Francisco con la ayuda de algunos inversionistas. La compañía tuvo ingresos por $1.5 millones en 2006 y Riney espera que alcance los $4 millones este año. “Fue el tipo de negocio que pudo crecer orgánicamente sin gastar mucho dinero en las primeras fases” dice.

 Menos puede ser más

Los aspirantes a empresarios suelen pensar que empezar un negocio exitoso requiere grandes cantidades de efectivo para pagar una oficina, empleados y marketing profesional. Pero muchos están descubriendo las ventajas de usar muy poco o nada de capital externo y conservar la mayor cantidad de efectivo posible para impulsar el crecimiento del negocio.

Hay muchas razones de peso para seguir esta ruta. Por ejemplo, mientras menos inversionistas externos tenga, menos capital y control pierde ante personas que tienen prioridades diferentes a las suyas. Los inversionistas externos podrían desear un crecimiento del negocio demasiado rápido para ver sus retornos lo antes posible, aunque el crecimiento lento sea el mejor modelo de negocio. “Cuando trae a otro inversionista, instantáneamente esta en conflicto porque muchas veces el mejor interés para los accionistas no siempre será el suyo como presidente de la compañía”, dice Bill Payne, experto en inversiones privadas para la Kauffman Foundation en Kansas City, un centro para empresario. Es más, mantener las riendas sobre los gastos en la fase inicial del negocio significa que los errores que cometa será mucho menos costoso que si gastara mucho dinero, agrega.

Conserve el trabajo fijo

Hay  muchos métodos para autofinanciarse y ahorrar efectivo. Para empezar, algunos acuden a sus cuentas de banco, tarjetas de crédito y bienes raíces. Claro que esto es arriesgado si el negocio fracasa. Como Riney, una manera de asegurarse de que no va a quebrar al principio es mantener el trabajo fijo hasta que el negocio sea lo suficientemente rentable para mantenerse a si mismo.

También hay concurso de planes de negocio y becas gubernamentales disponibles para algunas compañías que empiezan. Y algunas veces los negocios pueden llegar a acuerdos con sus vendedores y otras empresas involucradas para retrasar los pagos, al menos hasta que la empresa sea rentable.

Wendy Fergeson, presidenta de la compañía Integrated Printing Solutions, compro en 2004 el negocio por $170,000 incluyendo una deuda de $1.2 millones. Fegerson gasto los meses siguientes llamando a vendedores y proveedores de la compañía explicándoles la situación y renegociando términos, incluso consiguiendo un descuento de $400 en la renta. Asimismo, desarrollo una estrategia para maximizar el uso de sus tarjetas de crédito personales. Continuo moviendo una deuda de $60,000 entre unas 15 tarjetas de crédito pagando el balance dentro del periodo de gracia antes de que los intereses entraran en efecto. También uso todas las ofertas del 0% en financiación que encontró.

Ahora, la compañía está en terreno positivo y registro ventas de $1.7 millones el año pasado. Otros empresarios independientes hacen todo lo posible para mantener sus costos bajos, ya sea comprando equipo de oficina usado en eBay, usando pasantes y freelancers en lugar de contratar a alguien por nomina.

 Busque ayude ad honorém

Hay muchos recursos para las nuevas empresas que buscan minimizar costos, dice Candida Brush, profesora de temas empresariales en el Babson College en Wellesley, Massachusetts. Muchas universidades ofrecen ayuda gratis o a bajo costo para empresarios locales, como consejería legal o de propiedad intelectual.

Unirse a las redes locales de negocios o centros de desarrollo de pequeños negocios también le pueden dar a los empresarios la oportunidad de ser asesorados por otros empresarios y quizá hacer intercambio de servicios, como ayuda contable, sin pagar dinero.

Ahora negocios basados únicamente en Internet ofrecen ahora servicios tradicionales – como ayuda legal para constituir el negocio, servicios de relaciones públicas y creación de anuncios en televisión – por solo una parte de lo que costaría tradicionalmente. Por lo tanto, empresarios que comparan precios de servicios, dice Brush, pueden encontrar muchas maneras de mantener bajos sus costos.

Basado en un Artículo de The Wall Street Journal.

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